Galletas de Lavanda
Estas galletas de lavanda son mantecosas, crujientes y ligeramente aromatizadas con lavanda. Son un delicioso y simple bocadillo que se puede disfrutar en cualquier momento del día.
Al desarrollar esta receta de galletas de lavanda, sabía que quería mantenerla simple para que el sabor floral pudiera brillar realmente.
El punto de partida fue mi muy popular galleta delgada de limón. Si te interesa la ciencia de la repostería, recomiendo leer esa publicación para aprender cómo reajusté los ingredientes para crear una galleta perfectamente delgada y crujiente.
Dado que ya había hecho el trabajo para perfeccionar la textura de la receta original, adaptarla para hacer una galleta de lavanda fue bastante sencillo.
El limón y la lavanda combinan bien, pero para esta receta decidí reducir un poco el limón. Agregué una buena cantidad de flores de lavanda trituradas para un delicioso sabor floral que no abruma.
Ingredientes
Notas sobre los ingredientes
- Mantequilla: La mantequilla debe ser maleable pero no blanda. La mantequilla a temperatura ambiente debe estar alrededor de 21°C (70°F).
- Azúcar glass: El azúcar en polvo absorbe más humedad de la masa que el azúcar granulada. Esto ayuda a que la galleta se extienda más en el horno y se mantenga crujiente días después de hornear. Puedes usar la misma cantidad (por peso) de azúcar granulada.
- Lavanda: Puedes ajustar la cantidad de lavanda según la potencia de tu lavanda y tus preferencias personales.
- Bicarbonato de sodio: Solo un toque de bicarbonato de sodio ayuda a crear la textura ligera y abierta de la galleta.
Cómo hacer Galletas de Lavanda
Consulta la tarjeta de receta para medidas exactas e instrucciones detalladas.
- Coloca las flores de lavanda sobre una tabla de cortar.
- Pica la lavanda hasta que se convierta en un polvo grueso.
- Combina el azúcar, la mantequilla y la lavanda triturada en un tazón de mezcla.
- Bate hasta que esté ligero y esponjoso. Agrega el jugo de limón y el huevo.
- Mezcla para incorporar.
- Agrega la harina y mezcla para combinar.
- Raspa el tazón para asegurarte de que todos los ingredientes estén combinados.
- Usa un scooper pequeño para galletas o una cucharada para porcionar la masa.
- Espolvorea la parte superior de las galletas con flores o yemas de lavanda.
- Espacia las galletas dejando suficiente espacio para que se expandan.
- Hornea hasta que los bordes estén dorados y el centro esté cocido.
Consejos del pastelero para hacer Galletas de Lavanda
- A diferencia de muchas otras masas para galletas, esta masa de galleta de lavanda no se enfría antes de hornear. Debido a que la mantequilla en la masa es blanda, las galletas se extienden delgadas en el horno y se hornean bien crujientes.
- Puedes hacer la masa con anticipación. Forma las bolas de galleta y refrigéralas o congélalas hasta que estés listo para hornear. Coloca las bolas de masa frías en la bandeja para galletas y déjalas volver a temperatura ambiente antes de hornear.
- El papel pergamino es la mejor superficie para hornear estas galletas.
Almacenamiento
- Las galletas de lavanda se mantendrán en un recipiente cerrado a temperatura ambiente durante 2-3 días.
- Las galletas sobrantes pueden congelarse. Seguirán siendo crujientes incluso después de descongelarlas.
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Preguntas Frecuentes
1. ¿Puedo usar lavanda fresca para la receta?
Sí, puedes usar lavanda fresca, pero asegúrate de que esté bien lavada y seca antes de usarla.
2. ¿Las galletas de lavanda son aptas para diabéticos?
Las galletas contienen azúcar, por lo que deben consumirse con moderación si eres diabético. Consulta a tu médico para obtener opciones más saludables.
3. ¿Puedo sustituir la mantequilla por margarina?
Sí, puedes usar margarina, pero el sabor y la textura pueden variar ligeramente.
4. ¿Cómo puedo almacenar las galletas adecuadamente?
Guarda las galletas en un recipiente hermético a temperatura ambiente para mantener su frescura por 2-3 días.
5. ¿Se pueden congelar estas galletas?
Sí, las galletas se pueden congelar. Se mantendrán crujientes incluso después de ser descongeladas.
